Días atrás, un grupo de personas de distinta procedencia
política firmó un Documento proponiendo
“la recuperación del Proceso de Cambio”. Algunos
de los firmantes estuvieron en funciones de Gobierno
y abandonaron sus actividades en medio de críticas
de las organizaciones sociales debido a una deficiente
gestión, y forman parte de lo que podríamos
denominar un grupo de “resentidos” políticos, por
su paso o cercanía al Proceso de Cambio liderizado
por el movimiento indígena-campesino y popular,
al que con el tiempo abandonaron o desertaron por
algún tipo de desavenencia, enojo o malestar.