I
En primer lugar, necesitamos hacer una cuidadosa lectura de los acontecimientos sociales, políticos, económicos y culturales transitados desde la pueblada del 2001.
Como protagonistas de aquellos acontecimientos, debemos reconocer los límites de los proyectos políticos (en algunos participamos, en otros no, y en otros acompañamos) actuantes en el periodo. Todos ellos fueron en definitiva no aptos para encauzar el proceso de transformación y emancipación social. Es lo que explica la actual CRISIS de ALTERNATIVA POLÍTICA como dato esencial a resolver en el presente y futuro inmediato.
Algunos de esos proyectos acumulaban (lo siguen haciendo) en la CTA, hoy CTA Autónoma; principal ámbito de nuestra actuación. Esos proyectos actúan e intervienen con sus iniciativas para empujar o dificultar objetivos establecidos desde la Central desde 2002 (Congreso de Mar del Plata por la construcción de un movimiento político social y cultural de liberación).
La rebelión popular desplegada especialmente entre 1997/8 y 2001 tuvo a la CTA como un destacado protagonista de la lucha, la organización social y política, la construcción de sujetos activos y movilizados, contribuyendo a la elaboración de un programa, que distorsionado es hoy realidad (asignación universal para menores; generalización de las jubilaciones; política social masiva).
Pese a ello, la CTA se fracturó hacia 2010 desde una crisis evidenciada desde 2007/8 ante la consolidación de la propuesta kirchnerista en cientos espacios del movimiento popular. Muchas organizaciones sociales y políticas fueron atravesadas y cooptadaspor la iniciativa política del kirchnerismo, poniendo en riesgo la autonomía de la Central. Ello impone una caracterización adecuada del proceso político 2003-2015 y la hegemonía kirchnerista en ámbitos de la sociedad y del movimiento popular.
El reconocimiento legal de la CTA A a fines del 2014 y la elección de autoridades de mayo de ese año pareció consolidar a la CTA A. Los distintos proyectos políticos en su seno limitaron la disposición de la CTA A para constituirse en articulador de un amplio movimiento popular con diversidad de proyectos políticos, desde sectores del kirchnerismo a la más diversa izquierda. Ese papel de articulador del movimiento popular sigue siendo parte esencial del trabajo de la CTA A.
II
El nuevo gobierno de Macri nos desafía a profundizar el diagnóstico sobre el orden capitalista y la lucha de clases local, regional y mundial.
Algunos pretenden instalar el diagnóstico del retorno del neoliberalismo, como si los cambios institucionales de los 90´ no hayan continuado operando bajo gobiernos K. Con esa argumentación enfrentan al gobierno Macri para generar condiciones de retorno en el próximo turno electoral.
Desde allí se propugna un frente amplio anti Macri, que escamotea un severo análisis de las continuidades esenciales en estos años del modelo productivo sojero, mega minero, de fracking y de industrialización dependiente, junto al condicionante del endeudamiento.
Nuestro desafío es la confrontación al gobierno Macri y la denuncia de las continuidades esenciales del modelo productivo K respecto de lo construido en los 90´ y su antecedente desde la dictadura genocida. Por eso, nuestra propuesta y desafío se afirma en la autonomía y la lucha, alentando la orientación de la CTA A, como Central CLASISTA, ANTI CAPITALISTA Y ANTIIMPERIALISTA.
En ese marco existe la posibilidad de ampliar las alianzas con sectores del kirchnerismo y otros, pero para una perspectiva no solo anti Macri, sino anticapitalista. Ese es el marco para intentar articular el amplio espectro de la izquierda en el movimiento popular, algo similar al intento de la articulación para la movilización del 22/12 por un bono compensatorio defin de año.
Es cierto que los 40 años que nos separan del 24/3/76 generó un proceso de despolitización y desideologización de gran parte dela sociedad argentina, y eso dificulta cualquier radicalizada propuesta. Ello nos exige más esfuerzo en la argumentación relativa a la necesidad de confrontar con el sistema capitalista, algo en lo que deberemos intervenir, entre otras iniciativas, desde los Encuentros por un Pensamiento Crítico.
Estamos desafiados a discutir el modelo productivo, como base de la crisis contemporánea, el cambio climático, los problemas energéticos y difundir el programa por la SOBERANÍA ALIMENTARIA, ENERGETICA, FINANCIERA, etc.
La lucha por la SOBERANÍA POPULAR es uno de nuestros ejes de acumulación.
III
Estamos desafiados a considerar el proceso de cambio político en Nuestramérica desde el comienzo del Siglo XXI y a pensar los desafíos actuales para avanzar en el proceso de emancipación social.
Para eso debemos discutir la política internacional de la CTA A. Somos promotores de la mayor articulación de la Central en el ESNA, que hará su VII° Encuentro en Montevideo a fines de marzo y comienzo de abril. La ocasión será propicia para compartir diagnóstico y propuesta con otras/os compañeras/os de Nuestramérica sobre las tareas del movimiento obrero regional y mundial para enfrentar el momento actual de ofensiva de las clases dominantes en la región y el mundo.
Construir nuestra ofensiva es la tarea y el desafío, por ello el anticapitalismo y antiimperialismo, asociado al anticolonialismo, en lucha contra el patriarcalismo, el racismo y toda forma de discriminación.
Hacia el 2004 Hugo Chávez nos señalaba que el capitalismo no tiene soluciones para los pueblos de Nuestramérica y del mundo. Tenía razón y ahora se pueden ver con claridad los límites de los procesos de cambio político que en la región no avanzan en modificaciones estructurales de las relaciones sociales de producción, distribución, cambio y consumo.
Esos límites son la contracara de la ofensiva del capital sobre el trabajo, el saqueo de los bienes comunes y la iniciativa cultural reaccionaria y consumista que se despliega con la asistencia cómplice de los monopolios de la comunicación e información.
El sistema capitalista y su hegemonía estadounidense despliegan una enorme variedad de iniciativas militares, culturales, económicas y sociales para postergar su eclosión. Nuestra tarea debe desplegarse en múltiples iniciativas de articulación del movimiento popular mundial por la emancipación social. En ese marco se inscribe nuestra lucha contra la liberalización, sea por la vía de los tratados de libre competencia, caso de las negociaciones con la Unión Europea o la Alianza del Pacifico; los de defensa de los inversores externos (tratados bilaterales de inversión); todo lo cual lo hacemos desde la integración y lucha de los pueblos.
IV
Los desafíos para el 2016 son gigantescos. Ratificamos nuestra identidad en la CTA A y afirmamos el carácter estratégico de la Central para construir la unidad más amplia del movimiento popular en la Argentina, en Nuestramérica y en el mundo.
Lucharemos para evitar fragmentaciones innecesarias en el seno del movimiento popular.Se trata de impulsar el fortalecimiento de la definición y lucha por los objetivos colectivos de la clase por encima de las pretensiones sectoriales o facciosas, fortaleciendo los sindicatos y organizaciones sociales de trabajadoras y trabajadores en la CTA A.
Nos esforzaremos por construir la ofensiva del movimiento de trabajadoras/es en articulación con el diverso movimiento popular. Es parte de nuestro aporte a la conformación del movimiento político social y cultural de liberación.
Estimularemos la necesario fortaleza de la CTA A en el sector privado; del despliegue integral de la batalla por la educación y organización de las/os trabajadoras/es del sector; de una mayor organización y articulación con las diversas formas que asume el movimiento territorial y social; y estimular el debate y el pensamiento crítico para ser más rigurosos en el conocimiento de la realidad y su transformación.
Son tareas definidas en la CTA A que nos comprometen junto al conjunto de la militancia que construye la Central en todo el territorio nacional. Nos remite a una historia de pluralidad, autonomía y lucha, por la libertad y la democracia sindical; por un nuevo modelo sindical con base en democráticos debates, contra las corporaciones sindicales y el unicato de un viejo sindicalismo, siendo conscientes de nuestros propios problemas para superar esas antiguas prácticas. Es el mandato de Burzaco y reconocer críticamente nuestras limitaciones y desafíos para construir una Central de masas para la unidad del movimiento de trabajadores.
Este material requiere ser completado en múltiples encuentros de la militancia, pero para reflexionar en este fin de año y comienzo de otro de luchas por la emancipación, lo hacemos circular. Quien quiera adherir puede mandar su adhesión a: corrientecta@gmail.com
¡Feliz 2016!
1 de enero de 2016
FIRMAN: José Rigane, Víctor Mendibil, Carlos Chile, Hugo Blasco, Guillermo Díaz, Marcos Wolman, Pola Monti, José Luis Ronconi, Julio Gambina, Beatriz Rajland, Daniel Campione, Carla Rodríguez, Néstor Jeifetz,Homero Ramírez, Daniela Rodríguez, Maria Eugenia Kena Reyes Araya, Gustavo Tere, Gabriel Martínez,AngelD´Amico, Rubén Chirizola, Oscar Quinteros, María Elena Saludas, Eduardo Smidt, Manuel Gutiérrez, Carlos Oroz, Susana Colli, Néstor Dimilia, Julio Acosta, Cristian Rosso, Luciano Vuillerin, José Cisneros, Mauro Perrone, Fernando Pita,Leandro del Grecco, Osvaldo Boulán, Sergio Pellegrini, Rodolfo Rodríguez, Olga Bastio, Marisa López, Mariano Randazzo, José Lualdi, Edgardo Fernández Stacco, Gabriel Cena, Hilda Abad, Emiliano Randazzo, Carlos Perusini, Marcos Perusini, Héctor Manfredo, Rubén Giménez, Toribio Navarro, Ricardo Morel, Mario Ramirez, Sixto Aguirre,